Si bien las declaraciones de la semana pasada de Janet Yellen no daban pie a pensar que estamos ante una subida del tipo de interés la semana próxima en el mercado estadounidense, fue Mario Draghi quien ofreció un discurso más terrenal, centrado en la innovación, por fin se habla de innovación. Se habla de innovación porque seguimos en la zona euro con un ritmo de crecimiento demasiado débil, crecimiento que acompaña a unas tasas de productividad reducidas de un tiempo a esta parte. Hay que acometer cambios basados en reformas estructurales de calado, de esas que se centran en el bienestar de la próxima generación y no en el bienestar de los integrantes de los partidos políticos que acuden a la próxima elección. Y de esto se han dado cuenta desde la Unión Europea ahora.
Con respecto a las medidas económicas anunciadas, el tipo de interés de Australia se mantuvo en el 1,75% como se anunciaba. Acierto también en el tipo de India, que se ha vuelto a situar en el 6,50%. Sin embargo, para el IPC anual chino, se ha observado un decremento hasta el 2,00% desde el 2,30%, decremento que se puede interpretar como negativo, dados los niveles actuales, con respecto a la atracción de inversión extranjera.
A parte del dato de la producción industrial china que se espera se sitúe a la baja, en el 5,90%, lo cual ha de ser tomado como negativo, los grandes actores para la semana que entra son Gran Bretaña y el índice de precios al consumo anual europeo. Éste último se espera siga en negativo, concretamente en el -0,10%. Por debajo de esta cifra estaríamos ante un claro escenario bajista para el Euro.
En Gran Bretaña también conoceremos el IPC anual, pero en este caso se espera positivo y en torno al 0,4%. También conoceremos la tasa de desempleo, cercana al 5,10% y la decisión sobre tipos de interés, que según apuntan los analistas se mantendrá en el 0,50%.
En Estados Unidos, al margen de los nuevos permisos de construcción, atenderemos a las declaraciones sobre las proyecciones económicas del Comité de Mercado Abierto de la Fed, el FOMC.
Que las grandes noticias de la semana que viene tengan que ver con Europa y Gran Bretaña no es coincidencia ante la próxima decisión sobre el Brexit. Para la reflexión un eslogan integrador, God save the qUEen.