Diversos inversores canadienses se han mostrado sorprendidos con la rapidez del presidente mexicano conocido como AMLO para “cambiar las reglas del juego a mitad del partido”. El mismo día que México celebró la entrada en vigor de su nuevo acuerdo comercial con Estados Unidos y Canadá (el 1 de julio) un grupo de inversores canadienses del sector energético han advertido que el gobierno de México podría estar violando el pacto por no respetar contratos lo que ha despertado el enojo de Canadá por la política energética de López Obrador.
Sorpresa y preocupación que le han hecho llegar cuatro empresas a Chrystia Freeland (la viceprimera ministra de Canadá), a Bill Morneau (ministro de finanzas), a François-Philippe Champagne (cancilller) y a otros funcionarios a través de una carta, donde destacan su preocupación por la amenaza que representa este cambio en las reglas del juego realizado de manera unilateral por el gobierno de México y que pesa sobre sus inversiones en dicha nación latinoamericana por lo que piden a su gobierno que presione al país respecto a este tema.
Se estima que las empresas canadienses han invertido hasta ahora en el sector energético de México aproximadamente 9.000 millones de dólares de los cuales 3.100 millones son para el sector de energías renovables (más de la tercera parte de la inversión).
El enfado de Canadá por la política energética de López Obrador no viene solo, sino que también se ven desconcertados inversores europeos (muchos de ellos españoles) así como inversores estadounidenses que están siendo afectados por los cambios de la administración del presidente AMLO en cuanto al asunto energético.
Aunque el gobierno de AMLO no ha dado una respuesta a dichas empresas, la administración del presidente argumenta de manera extraoficial que México necesita incentivar en mayor proporción el papel que juega el estado en el sector energético ya que, según el mandatario, los anteriores gobiernos de su país favorecieron a inversionistas privados mientras que él en cambio intenta renegociar contratos por miles de millones de dólares para fortalecer las arcas públicas sobretodo ahora cuando la nación intenta reanimar su ya golpeada economía por la pandemia del Covid-19.
Hasta el momento ningún portavoz del Gobierno mexicano se ha puesto en contacto con ninguna de las empresas involucradas para explicar dichos cambios en los contratos o lo que pueden esperar en el futuro. Fuentes del sector indican que el objetivo principal en estos momentos es que se abra una línea de dialogo entre las autoridades mexicanas y las empresas afectadas para llegar a una solución diplomática de la situación.
Fuente de la información: Reuters